La población de osos polares se encuentra peligrosamente baja en la famosa villa canadiense Churchil. Churchill, Canadá es famosa por los osos polares que constantemente visitan la zona, normalmente alrededor de Octubre y Noviembre.
En la tarde menguante del 5 de noviembre, los oficiales de conservación de Manitoba saltaron de su camioneta hacia la calle principal que se encontraba cubierta de nieve en la ciudad de Churchill. Dispararon cartuchos «asustadores» explosivos desde una escopeta, como fuegos artificiales lanzados desde un arma de fuego, a un intruso. Un oso polar se había acercado a Churchill.
Después de disparar algunos tiros más (sin dañar a los osos), los oficiales saltaron en su camioneta y corrieron por la carretera para asegurarse de que uno de estos animales no entrara a la ciudad. Durante octubre y noviembre de cada año, los osos de marfil a menudo pasean por Churchill, aunque generalmente cuando está oscuro. Los disparos de escopeta se disparan durante la noche.
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Churchill, hogar de osos
Los bares, hoteles y hogares de Churchill se encuentran en el medio muerto del reino de otoño de los osos polares. «Este es un país de osos polares», dijo Andrew Derocher, un veterano científico de osos polares de la Universidad de Alberta que llegó por primera vez a Churchill para investigar esta especia durante 35 años.
Los osos se congregan en este rincón a lo largo de la vasta Bahía Hudson (Hudson´s Bay) de Canadá porque es uno de los primeros lugares donde el mar se congela o el hielo golpeado por el viento se acumula en las costas. Los osos hambrientos necesitan hielo marino para ir a buscar focas gordas sin pretensiones. A diferencia de otros, los osos polares son mamíferos marinos. Pueden pasar tiempo en tierra, pero en el fondo, son osos de mar.
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El futuro de los osos polares
Hoy, sin embargo, el futuro de los osos marinos alrededor de Churchill parece sombrío. En Churchill y sus alrededores (llamada Western Hudson Bay), su población se está hundiendo. Las últimas dos décadas han sido particularmente duras. «La población ha disminuido sustancialmente desde finales de los noventa en un 30 por ciento», dijo Evan Richardson, científico investigador de Environment and Climate Change Canada, una agencia gubernamental. Lo que una vez fue una población de 1,200 especímenes, ahora es 800, y está cayendo.
Aun así, todavía hay cientos de ellos están concentrados en un área relativamente pequeña. Cuando llegue el otoño, los restaurantes de Churchill se llenan de visitantes vestidos con gruesas parkas (chinos, italianos, estadounidenses y más allá) que han vislumbrado a los osos blancos espectaculares. «Los osos polares tienen elegancia», dijo Freddy Gamble, quien reside en la ciudad de Nueva York, pero se enamoró de los osos de Churchill hace décadas, y los ha visitado una docena de veces desde entonces. Hace mucho tiempo, los osos descubrieron que Churchill se congeló primero, dijo. «Lo han sabido por miles de años.
Y por mucho que Churchill sea una atracción para los osos polares, también es invaluable para la ciencia. «Es la población de osos polares mejor estudiada del mundo», dijo Richardson.
Con información de Mashable
