Este cuatro de mayo es un día muy especial, a quienes cumplan años les damos puntos dobles, pues se celebra ni más ni menos el día que nació la franquicia más grande de la historia: Star Wars.

Esta galaxia muy, muy lejana cosechó grandes impactos en la industria cinematográfica y vamos a enumerar algunas de estas aportaciones.

Star Wars marcó un antes y un después.

“He ido lejos en algunos lugares” -George Lucas, detrás de cámaras – La Amenaza Fantasma (1999).

Antes de su estreno, el cine en Hollywood ya tenía tintes comerciales, pero la tendencia era la crítica social, como era tradición del arte post-guerras y la audiencia ya se estaba hartando de no ver historias más frescas.

Entonces, Star Wars arribó en el año de 1977 como anillo al dedo, e inauguró un nuevo tipo de cine comercial, enfocado en contar historias masivas con universos complejos.

Además, hizo retornar el subgénero de sci-fi y enumeró una lista de quehaceres para la industria del cine, incluyendo la radical mejora de sus efectos especiales, con tal de superar el gran éxito de George Lucas.

Los efectos prácticos.

“Usa la fuerza” – Obi Wan Kenobi, Una Nueva Esperanza (1977).

Antes de Star Wars, el mayor logro en efectos visuales del espacio era 2001: A Space Odyssey de Stanley Kubrick, pero producciones así no eran una constante, sino un logro ocasional.

Con el auge comercial de la space opera, los estudios comenzaron a invertir más en sus efectos cuando vieron que estas historias podían vender, y bastante. Gracias a avances tecnológicos visuales, como los de Star Wars, el tema dejó de ser material experimental y se convirtió en una constante de Hollywood.

CGI

“No, yo soy tu padre” – Darth Vader, El Imperio Contraataca (1980).

Todo avance primero fue un experimento. La tecnología del cine no es excepción.

En los años 80 y 90 se habían realizado acercamientos a la imagen generada por computadora (CGI, por sus siglas en inglés), aquellos visuales creados digitalmente y que interactuan con la historia para darle detalle y movimiento, pero no están ahí realmente.

Cintas como Tron (1982) y Aracnofobia (1990) fueron pioneras en tratar esta novedosa técnica, y Jurassic Park (1993) destaca por el maestro uso de estos efectos, los cuales fueron realizados por Industrial Light and Magic Studios, fundada por George Lucas.

Fue hasta La Amenaza Fantasma (1999), que se realizó una película consistente con el CGI. El experimento de Lucas dio paso a una generación de películas que nos trajeron grandes espectáculos con invasiones planetarias y explosiones masivas.

Esto apunta a que, de no haberse estrenado La Amenaza Fantasma, tal vez ningún estudio se habría arriesgado a usar esta tecnología de vanguardia, y producciones como el universo cinematográfico de Marvel nunca habrían existido, así como muchas de nuestras películas favoritas.

Tras concluir la trilogía de Anakin Skywalker, con la Venganza de los Sith, George Lucas recibió un premio especial, por su contribución en los avances de las ciencias cinematográficas, en 2005.

¿Dónde puedo ver la saga?

A parte de los numerosos servicios de streaming y compras en línea, también puedes disfrutar la totalidad de esta saga con sus películas actualmente disponibles en la plataforma Netflix, incluyendo su aclamadísima serie The Clone Wars (2008), la cual es un excelente programa para ver en familia.

La plataforma incluye un período gratuito de prueba, con acceso completo a su repertorio, ¡y recomendamos aprovecharla al máximo este 4 de mayo!

Imagen: Hotmart.com

¿Piensas hacer una maratón de Star Wars como muchos de nosotros? ¿Cuál es tu episodio favorito? ¿De qué color es tu lightsaber?

Asegúrate de contestar estas preguntas existenciales y deja tu comentario.

May the 4th be with you.

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