Roel-Jan Mouw se incorporó a Woodwing en verano de 2013 / Foto: Arturo Roseti

El jueves 6 de marzo la Universidad Panamericana recibió a Roel-Jan Mouw, CEO de la compañía holandesa Woodwing, como parte de las actividades de la Cumbre Mundial de Diseño en Prensa. Estuvo con nosotros para dar una conferencia acerca de la importancia de un buen impacto mediático para el posicionamiento de las empresas.

Mouw se incorporó a Woodwing en verano de 2013, y busca una nueva visión para la compañía que nació en 2000. La expansión de esta empresa ha sido veloz: para enero de 2006 ya contaban con oficinas en Asia y Australia. Uno de sus grandes momentos llegó en abril de 2010, cuando Steve Jobs anunció a la revista Time que estaba a punto de lanzar su nuevo producto, la Tablet. Esto marcó definitivamente el emporio de los dispositivos móviles, y con ello una revolución total en la forma de comunicarse.

La base de una buena estrategia para cimentar la buena relación entre una empresa y sus clientes radica en hacer uso máximo de todas las herramientas comunicativas disponibles hoy en día. Hay muchísimos canales a través de los cuales llegar a clientes potenciales, o conservar los que ya se tienen. Tres partes integran las vías de interacción entre una marca y sus consumidores:

OwnedSon los recursos con los que la empresa ya cuenta: su material, contenidos, el producto o servicio que ofrece, sus sitios en Internet.

Earned: lo que se obtiene de las campañas / estrategias de posicionamiento.

Paid: lo que debe pagarse, como anuncios, manejo de redes, diseño de estrategias, patrocinios.

Con estos tres elementos, si son bien empleados, la imagen y alcance de una marca pueden llegar muy alto. De acuerdo con Mouw, dos características distinguen a la comunicación de marcas: global y visual. El impacto de la información es masivo, cuenta con la capacidad de llegar a millones de personas en cuestión de minutos, pero para lograr un efecto duradero es necesario que capture la atención de estas masas. ¿Cómo? Es aquí que entra en juego el plano visual, ese momento clave en que una persona se deja llevar por la contemplación de algo grato, llamativo, grande, que resalte y le haga detenerse a examinarlo. El gusto de los clientes se ha refinado en cuanto a lo que es agradable a la vista y lo que capta su atención; hay que ofrecer un auténtico festival para los sentidos.

Mouw afirmó que todo se ha transformado en emporios comerciales: revistas, bebidas energéticas, todo. La llegada de Internet y las redes sociales hacen que los consumidores tengan acceso a información acerca del producto 24/7, por lo que se vuelven más críticos y demandantes. Es crucial que la información a la que ellos tienen acceso sea de calidad y que todo el tiempo se esté generando más, de lo contrario el cliente perderá el interés y se alejará rápidamente. Pero, al final, es bueno que exista tal demanda de interacción público – empresa. Esta presión es lo que motiva el cambio, la necesidad de estar en constante innovación, y la demanda hacia las empresas de sostener este ritmo evolutivo.

Mouw cerró su participación recalcando una vez más la necesidad de ir con los nuevos tiempos, pues es la única forma en que una compañía puede permanecer a flote.

Michelle López