No lo podemos evitar, es parte de nuestra naturaleza como seres humanos la búsqueda constante de la perfección y a su vez, de encontrar formas diferentes de expresarnos. Desde la antigüedad, los cosméticos han jugado un papel importante en esta búsqueda.

Inicialmente fue utilizado por los egipcios, quienes empleaban desde veneno de alacrán, hasta pigmentos elaborados con productos naturales para acentuar las facciones del rostro.

Actualmente, existe una amplia gama de productos cosméticos, y te maquilles o no, probablemente no te has puesto a pensar en cuáles son los químicos que se usan para elaborarlos, y si estos pueden tener efectos dañinos para la salud.

Aquí te contamos de cinco sustancias a vigilar:

  1. Dimeticona

Este tipo de silicona puede encontrarse en una gran cantidad de productos cosméticos y de cuidado personal. Suele utilizarse para dar una textura suave al cabello y la piel.

Sin embargo, puede tapar los poros, lo que provoca que las toxinas de la piel se queden atascadas, y aparezca una irritación y acné.

  1. Plomo

El plomo es una toxina potente que puede originar alteraciones en el comportamiento y dificultades de aprendizaje, además de que impacta en la fertilidad en hombres y mujeres.

Estudios realizados por la Administración de Alimentos y Medicamentos estadounidense (FDA, por sus siglas en inglés) han hallado pequeñas concentraciones de este metal en los tubos labiales; de igual manera, se halla presente en los delineadores “kohl”, “kajal” o “surnia” y en algunos tintes para el cabello.

  1. Aceites

El aceite de ricino es el más encontrado en el maquillaje, especialmente en los labiales. Este se extrae de la semilla ricinus comminus, que es considerada una de las sustancias más tóxicas y peligrosas en el planeta. El empleo excesivo del mismo puede generar desde reacciones alérgicas, como erupciones en la piel, hasta la aparición de latidos irregulares en el corazón.

  1. Pigmentos

Diversos pigmentos, usualmente derivados del petróleo, contienen propiedades cancerígenas y pueden provocar reacciones alérgicas graves. Muchos de estos también incluyen metales pesados, que provocan alteraciones hormonales.

  1. Parafina

La parafina, conocida por tener una consistencia cerosa, es una mezcla sólida con propiedades hidratantes y exfoliantes. Para producirse se utiliza como materia prima petróleo y carbón, que pasan por diferentes procesos como los de destilación, enfriamiento, cristalización y filtración.

Se ha comprobado que el uso de esta sustancia puede provocar irritaciones en la piel y algunos tipos de cáncer en el sistema renal.

Aplicadores:

En los productos cosméticos pueden anidar una enorme cantidad de bacterias, especialmente en las brochas y la mascara de pestañas.

Las brochas deben de ser lavadas al menos una vez por semana. Esto no sólo ayudará a evitar infecciones, también lograrás que tus brochas duren más tiempo.

Cuando se trata de la mascara de pestañas, se recomienda tirar el tubo después de tres meses de uso. Esto se debe a que, según la clínica Mayo, bacterias como el estreptococo y algunos hongos pueden ser halladas en estos productos después de un tiempo.

Un maquillaje para cada persona:

Es necesario saber que hay diferentes tipos de piel, y para cada uno de estos se tienen que aplicar cosméticos con ciertas características.

Por ejemplo, no es recomendable aplicar bases hechas con aceites en pieles grasas, así como no es conveniente aplicar maquillajes que contengan minerales en pieles sensibles.

Es necesario conocer el tipo de piel que tenemos y cómo reacciona ante el uso de diferentes sustancias para evitar condiciones como eccema, dermatitis de contacto, irritación, sarpullido, acné, entre otras.