Comer es uno de los mayores placeres de la vida y más cuando estamos acompañados. Ya sea en un comedor, un restaurante o en tu propia casa, este momento del día es relajante, pero la pregunta difícil que nos hacemos siempre es: ¿A dónde vamos?

México está repleto de lugares atractivos, llenos de arte y rica comida. MediaLab fue a conocer una de estas ubicaciones llamada “Comedor Lucerna” y aquí te traemos los datos más relevantes del lugar para tu próxima cita.

Ubicado en la calle Lucerna, número 51, este comedor te impacta desde afuera con sus vivos colores y la imagen de Frida Kahlo impregnada en la pared. En la misma cuadra, hay varias obras callejeras que ayudan a incrementar el impacto visual que crea el lugar. Si te gustó el espectáculo de afuera, espera a probar la comida.

El interior no defrauda. Con mesas alargadas que ocupan el espacio amplio del centro y con decenas de paraguas de diferentes colores colgados del techo, hay cinco restaurantes para todo tipo de gustos, en los que se pueden pedir pizza, hot dogs, hamburguesas, donas y mariscos. Y el postre no se queda fuera: una “Bendita Paleta” para endulzar el día.

Acompañado o solo, el estilo de las mesas permite que interactúes con personas desconocidas venidas de todos los rincones de la ciudad y puedas conocer un poco de sus vidas y gustos gastronómicos. Se genera un ambiente familiar y agradable.

Nosotros probamos el Mac N’ Cheese Hot Dog y la Crispy Burger, pero había una gran cantidad de experiencias y sabores que fue difícil descartar todas las demás opciones.

Este local tiene su variedad de cervezas artesanales para obtener sabores diferentes a los ya conocidos por las tradicionales. La cerveza mexicana, Jabalí Bock, es una excelente opción para acompañar tu comida, aunque también tienes una variedad de cócteles para satisfacer otros gustos.

Tanto para una comida rápida o una velada romántica, este lugar está diseñado para atender todas tus necesidades y que puedas disfrutar de la compañía a tu alrededor. La música, los colores, el arte y la comida son parte esencial de la experiencia Lucerna.

En fin… debes ir para vivirlo.